Soy el esclavo de la Señora DamaGisela, a su lado el mas afortunado de los esclavos, hace unos años no hubiera soñado con poder lamer sus zapatos y en cambio ahora luzco con orgullo su collar, todo cuanto hago es poco, ELLA se merece eso y mucho mas y en mi mano está el intentar proporcionárselo

domingo, 6 de noviembre de 2011

compartiendo con un amigo

Buenos días.

Ayer fue un día de transición, al no encontrarme del todo bien, Mi AMA optó por relajar las normas y solo hice alguna cosa sin importancia como es el ir vestido con la ropa que Mi AMA me ha  ordenado lelvar esta semana.

Eso sí salimos a dar una vuelta visitar a la familia y quedar para comer en casa con un amigo, a este lo recibí vestido tal como Mi AMA desea, eso es, disfrazado de mujer, por que esa es la apariencia que tengo, este amigo no se sorprendió el verme así, pues ya nos conoce y sabe de nuestros gustos, de todas formas al principio resultaba algo violento para mi, pero he de reconocer que a medida que pasaba el tiempo me sentía mas cómodo y dejo de importarme.

Tanto Mi AMA como el actuaron con total normalidad como si fuera de lo mas común el verme vestido como una putita aunque imagino que si hubiera tenido que cumplir las normas, hubiera alucinado un poco mas.

El caso es que me siento cómodo y a gusto viviendo el bdsm tal como lo estamos viviendo aunque también quedo claro que he de esforzarme mas en conseguir hacer aquellas cosas que son mas costosas de realizar y que por vaguería suelo ir dejando y termino por no hacerlas.

Y ahora pues toca el preparar el desayuno, así que hasta mañana

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